Intento de secuestro virtual: “Decían que eran del cartel de Sinaloa y nos iban a acribillar”
Una pareja de empresarios, que por poco fueron víctimas de esa modalidad, detalló cómo operan bandas. El OIJ ya tiene otras denuncias similares en Cartago.
Una pareja de empresarios dedicados a la venta de contenedores estuvo a punto de ser víctima de un falso secuestro virtual.
Todo comenzó cuando recibieron un mensaje vía WhatsApp desde un número con código +57, correspondiente a Colombia. El supuesto interesado, identificado como “Fernando”, contactó al número de la empresa y aseguró que quería comprar un contenedor. A partir de ahí, iniciaron las negociaciones.
El sujeto envió una ubicación en El Guarco de Cartago para hacer una visita y tomar las mediciones correspondientes, como parte normal de una transacción de ese tipo. Pactaron el encuentro y se trasladaron al lugar.
“Ya en el lugar nos pidieron un nombre de algún familiar o amigo para confirmar que éramos empresa de contenedores. Le dimos el número de la contadora, hicieron la llamada, y ahí nos pasaron a un mexicano; y en ese momento, tras unos 10 minutos en la llamada, al mismo tiempo a ella la estaban amenazando, diciéndole que nos tenían secuestrados, que no hiciera nada, que no intentara llamarnos; que nos habían quitado los celulares y que, si no hacía caso, nos iban a acribillar”, explicó Marcela Obando, una de las víctimas.
Según relató, los delincuentes inicialmente exigieron ₡5 millones y luego bajaron a ₡2 millones. Todo esto ocurría mientras ellos estaban aún en el lugar indicado, sin saber que estaban usando su ubicación en tiempo real para reforzar la amenaza.
“Ella (la contadora) logró comunicarse con nosotros, y cuando se dieron cuenta, el sujeto en la llamada se volvió más violento con nosotros. Nos dijo que no nos moviéramos, que eran del cartel de Sinaloa y que, si hacíamos algo, nos iban a acribillar”, añadió Obando.
Afortunadamente, lograron evitar la estafa.
“Fue una decisión de mi esposo, que arrancó el carro y nos fuimos. ‘Bloquee el número y apague el teléfono’. Nosotros nunca los vimos a ellos; todo fue por WhatsApp, en una llamada, lo único que vimos era la foto del perfil”, detalló la empresaria.
La afectada contó que en su caso no hicieron el depósito y que nunca los vieron. “Gracias a Dios nunca llegaron”, recalcó.
Tras lo ocurrido, acudieron a la comandancia del OIJ en la zona, donde les confirmaron que ya tenían reportes similares en ese sector. “Nos dijeron que tuvimos suerte, porque ya tenían otros casos de ese sector, y que incluso a ellos sí les habían sacado dinero”, indicó Obando.
En casos como este, la recomendación del OIJ es huir del sitio y presentar la denuncia, ya que, según explica Rándall Zúñiga, todo es virtual.
“Si se puede tomar un pantallazo en el momento, sería útil para el OIJ. Pero si no es posible, lo más importante es colgar la llamada, comunicarse con el OIJ y salir del lugar; y poner la denuncia”, recalcó Zúñiga.