¿Quién es Ruth López, la abogada de derechos humanos crítica de Nayib Bukele que fue detenida?
Según la Fiscalía, es sospechosa de peculado o apropiación indebida de fondos del Estado.
"Una escalada en la represión de las voces críticas".
Así ha descrito Cristosal, la principal organización dedicada a la defensa de los derechos humanos en El Salvador, la detención de una de sus directivas, Ruth López, en la noche del domingo.
López, quien como jefa de la Unidad de Anticorrupción y Justicia de la entidad encabezó varias investigaciones sobre el gobierno de Nayib Bukele, fue reconocida por la BBC como una de las 100 mujeres más influyentes e inspiradoras del mundo en 2024.
Según publicó la Fiscalía General de la República en la red social X, está acusada de presunto "peculado" o apropiación indebida de fondos del Estado antes de iniciar su trabajo en Cristosal.
La FGR, que no da detalles sobre los presuntos hechos, se remonta en su acusación a la época en la que López fue "asesora de confianza y mano derecha de Eugenio Chicas durante sus dos períodos en el Tribunal Supremo Electoral" (TSE).
Chicas, quien también fue arrestado en febrero acusado de enriquecimiento ilícito, presidió el TSE y después se desempeñó como secretario de Comunicaciones de la Presidencia de la República durante el mandato de Salvador Sánchez Cerén (FMNL, 2014-2019).
"Según las investigaciones y la información recabada en los allanamientos realizados en el caso de Eugenio Chicas, se ha identificado su participación activa (la de López) en los hechos que se le imputan", señala la publicación del FGR.
Especialista en derecho electoral
Nacida en San Salvador el 27 de septiembre de 1977, López pasó 26 de sus 47 años fuera del país.
Durante la guerra civil que asoló El Salvador (1980-1992), su familia decidió mudarse a Nicaragua, donde viviría durante 11 años, y, posteriormente, tras la separación de sus padres, López permaneció 16 años en Cuba.
Fue allí donde estudió para ser abogada, graduándose en Ciencias Jurídicas por la Universidad de La Habana en 1999. Recibió el título con honores, como la mejor alumna extranjera y mejor estudiante de su Facultad de Derecho.
En 2008 regresó a El Salvador, con el desafío de adaptarse al entorno académico y laboral de un país que aún lidiaba con las secuelas del conflicto armado y las transiciones políticas.
Y en su país natal se especializó en derecho electoral, derechos humanos y derecho comercial, comenzando su carrera en las instituciones públicas.
De 2008 a 2014 trabajó en el Tribunal Supremo Electoral (TSE), centrándose en el fortalecimiento de los procesos democráticos. Y entre 2014 y 2019 participó en la supervisión legal y administrativa en el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS).
López también se ha dedicado a la enseñanza en instituciones de educación superior. Es consultora y profesora asociada del Departamento de Ciencias Jurídicas en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA).
La docencia la ha compaginado con su cargo al frente de la Unidad de Anticorrupción y Justicia de Cristosal, una organización regional comprometida con la defensa de los derechos humanos.
Desde su cargo en la organización, López lideró una serie de investigaciones, como la que denunció el presunto uso de fondos públicos para espiar a periodistas y defensores de los derechos humanos o la supuesta corrupción a la hora de entregar contratos públicos durante la pandemia de covid-19.
A través de los medios de comunicación y redes sociales, la abogada, a quien sus compañeros describen como alguien "con espíritu de servicio", siempre mantuvo una postura crítica con el poder.
"Desde la perspectiva del poder, es mejor que la gente no sepa, porque en la medida que la gente no sabe, ejerce menos sus derechos, exige y se moviliza menos", declaró en una entrevista con el medio Alharaca en marzo de 2024.

"Ruth es de las voces más visibles y creíbles a nivel internacional", le dice a BBC Mundo el director ejecutivo de Cristosal, Noah Bullock, quien asegura que, con su detención, el gobierno decidió asumir cualquier costo político para mandar un mensaje "de que no tolerará voces críticas".
"Acto de represión"
"Tengan decencia, esto un día se va a acabar. No se pueden prestar a esto", les dijo López a los policías que llegaron a detenerla hacia las 11 de la noche del domingo 18 de mayo a su vivienda, según una grabación a la que hace referencia el medio local El Diario de Hoy.
"Aquí la única razón de la detención es que soy defensora de derechos humanos y trabajo en una ONG incómoda al gobierno. Ese es el único problema. Aquí no hay nada que explicar: eso de peculado, de corrupción, si aquí la que investiga corrupción soy yo", sostuvo.
Cristosal, en un primer comunicado publicado después de conocerse el arresto de López, lo tachó de un "acto de represión a las voces críticas", al tiempo que exigía la garantía a su integridad física y el respeto a su debido proceso.
A través de una serie de informes, Cristosal ha denunciado violaciones al debido proceso en El Salvador en el marco de un régimen de excepción que ya dura más de tres años.
Inicialmente impuesto para combatir la violencia de las pandillas, el estado de emergencia ha conducido a una drástica reducción de los homicidios, pero también ha resultado en el encarcelamiento de al menos 80.000 personas.
En un segundo comunicado publicado ya de madrugada, la entidad informó que hasta ese momento ni la familia ni el equipo legal de López habían logrado obtener información sobre su paradero, por lo que tachó lo ocurrido de "detención ilegal y posible desaparición forzada de corta duración".
A última hora de la tarde de este lunes, el director ejecutivo de Cristosal, Noah Bullock, le dijo a BBC Mundo que había recibido una notificación de que López fue traladada a "unas bartolinas" (calabozo) y que la familia se dirigía al lugar para verificarlo y entregarle medicinas.

Activistas y organismos internacionales se pronunciaron sobre la detención.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que también se refirió al hecho como "desaparición forzada", urgió a las autoridades informar del paradero de la abogada y de que se le garanticen "protección y las garantías constitucionales".
"Seguimos con preocupación la captura de Ruth López, quien ha denunciado con valentía la corrupción y las violaciones de derechos humanos del gobierno de Bukele", escribió Juanita Goebertus, directora para las Américas de Human Rights Watch.
"Durante años, Ruth López ha expuesto valientemente la corrupción y las violaciones de derechos humanos en El Salvador," agregó Goebertus en un comunicado. "Su arresto no es un incidente aislado; marca una peligrosa escalada en el intento del presidente Bukele por silenciar la disidencia".
Amnistía Internacional también se pronunció a través de su cuenta oficial de X, exigiendo la liberación inmediata de López.
A través de un mensaje compartido en esa red social, el Comité Demócrata de Política Exterior del Congreso de Estados Unidos también hizo patente su preocupación "por la detención y lo que significa para la deriva autoritaria en El Salvador".
"Estados Unidos debe apoyar a la sociedad civil y oponerse a cualquier esfuerzo —incluida una ley de 'agentes extranjeros'— para debilitar el estado de derecho en El Salvador".
El arresto tiene lugar días después de que el presidente Bukele anunciara que enviaría a la Asamblea Legislativa, que controla su partido Nuevas Ideas, una nueva "ley de agentes extranjeros" que busca asfixiar financieramente a las ONG, reteniéndoles el 30% de sus ingresos.
También se da en el contexto de la detención de otro activista, Alejandro Henríquez, del Foro del Agua, acusado de los delitos de desórdenes públicos y resistencia, tras haber mostrado su apoyo a uno grupo de campesinos que protestó frente a la casa del presidente pidiendo que no los desalojaran de sus tierras.
Asimismo, este mes tres periodistas del medio independiente salvadoreño El Faro dejaron el país tras conocer que -según denunciaron- el gobierno estaba preparando órdenes de arresto en su contra.
El Faro, que lleva años investigando las supuestas negociaciones del gobierno con líderes de las pandillas y denunciando que sus reporteros son objeto de hostigamiento y vigilancia como resultado, afirmó que, de emitirse las órdenes, constituirían "el asalto más frontal del Estado contra la libertad de prensa en El Salvador desde que Bukele asumió el cargo en 2019".
"En la última semana y media se ha dado una escalada en contra de la sociedad civil en general para eliminar cualquier voz crítica y continuar concentrando el poder", le dice a BBC Mundo Bullock, director ejecutivo de Cristosal.
"Estamos preocupados por el movimiento de derechos humanos en general", reconoció Bullock. "Nos estamos uniendo con otras organizaciones y otros voceros, porque la seguridad de todos en estos momentos es la unidad".
A través de la encargada de prensa para medios internacionales, BBC Mundo le solicitó a la Presidencia cuáles son los fundamentos para que la Fiscalía pidiera la detención de López, pero al momento de publicar esta nota aún no tenía respuesta.

Después del arresto de López, el comisionado presidencial de Derechos Humanos y Libertad de Expresión, Andrés Guzmán Caballero, hizo pública su renuncia a través de su cuenta personal en X y sin explicar los motivos.
"Renuncio con gratitud y admiración, consciente de que el camino hacia grandes cambios nunca es recto ni simple, pero siempre necesario", escribió, adjuntando una carta con fecha 15 de mayo dirigida al presidente Bukele.

La popularidad y la crítica
Análisis de Leire Ventas, corresponsal de BBC Mundo en Los Ángeles
Nayib Bukele no pierde ocasión para recordar que es el presidente mejor valorado del mundo.
A ello contribuyó su "guerra contra las pandillas", con la que consiguió desmantelar unas organizaciones criminales que llevaban décadas desangrando el país y pulverizar las cifras de homicidios, al tiempo que convertía a El Salvador en la nación con la tasa más alta de encarcelamiento.
También le llevó a consolidarse en la presidencia, arrasando en las elecciones de febrero del año pasado.
"Pero esa popularidad ya empieza a resquebrajarse", asegura el director ejecutivo de Cristosal, el estadounidense Noah Bullock.
Lo dice haciendo referencia a una serie de encuestas de opinión que se han publicado en los últimos meses y que coinciden en señalar una bajada en la aprobación del presidente entre la población.
En ese contexto tiene lugar lo que los críticos han llamado una "escalada en la ofensiva contra las voces críticas" y en la que incluyen la detención de Ruth López, la jefa de la Unidad Anticorrupción y de Justicia de Cristosal, aunque el motivo oficial sea la presunta apropiación indebida de fondos del Estado.
A esa "ofensiva" suman el anuncio de Bukele de que envió a la Asamblea Legislativa –también afín– un proyecto de ley "de agentes extranjeros". Una medida similar a la adoptada por su homólogo nicaragüense, Daniel Ortega.